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Siguiendo con los Bacardí, aquí tenemos uno de los primeros que nos sacó de la monotonía: Bacardí Black. A diferencia del blanco, con ligero aroma a vainilla y acabado seco, este ron negro tiene un acabado más amable y, aunque no excesivamente, se nota el añejado suplementario. Tiene 37.5º igual que el blanco, y se presenta en botella de 700 cl.

Un poco de historia.

La marca Bacardí fue fundada en Cuba (1862) por un emigrante catalán de Sitges, Facundo Bacardí Massó. Se cuenta que fue la esposa de Facundo la que sugirió usar un murciélago como distintivo de la marca, debido a que en la destilería habitaba una colonia de dichos quirópteros. A raíz de la revolución cubana, la empresa se trasladó a Puerto Rico donde ya poseía una destilería para evitar los aranceles del ron que exportaba a Estados Unidos. Cuenta con destilerías en otros países caribeños y su sede social reside en las Bermudas.

En la foto, junto al Bacardí Black aparece una botella menos habitual (35 cl) de Bacardí blanco.